Llegó mi mejor amigo hasta la puerta de mi casa con los ojos vidriosos, lágrimas pérfidas y ahogadas intentaban salir y traicionar la postura erguida de quién simula no le pasa nada, nada lo acongoja, nadie lo ha herido. Con la confianza de quién ha pasado muchos años en esa casa, irrumpió en la sala sin necesidad de un "adelante", me preguntó "¿estás sola?" y con un movimiento de cabeza asentí a aquella cuestión y sin más comenzó a sollozar cual bebé que ha sido arrebatado de los brazos de su madre.
Apenas comenzó a llorar y no pude más que abrazar a mi amigo, intentar calmar aquel amontonamiento de sentimientos que él estaba demostrando sin ningún tipo de embarazo, calmarlo para apaciguar aquella situación. Quedamos prendidos el uno en el otro cerca de 10 minutos sin decir nada, sólo allí, nuestros cuerpos entrelazados, su llanto mojando mi hombro, ahogando mi alma, porque no podía soportar verlo así, tan vulnerable, tan infeliz. Una vez calmado, se alejó de mi cuerpo, se paró y fue a beber agua, lo seguí hasta la cocina y entonces supe que era el momento de preguntarle "¿qué sucede?", él dijo "le he preguntado si alguna vez tendrá el valor de demostrarle al mundo lo que sucede entre nosotros en la intimidad, si es posible que acepte que lo nuestro es más que amistad, que todos estos años han sido maravillosos y que lo que somos es más que amigos."
Quedé anonadada, sabía perfecto de quién me hablaba, me sabía de memoria aquella situación, aquel sentimiento que él sentía por ella, y entendía que ella jamás tendría el valor de demostrarlo, porque la conocía bien, sabía que esa mujer sólo jugaba con mi mejor amigo, y todos estos años me había temido tener que vivir aquella escena que se estaba suscitando en la comodidad de mi hogar, el hogar de mi mejor amigo. Bebió el agua potable y me dijo, "tenías razón, ella jamás me amó, ella jamás lo hará y nunca se va desprender de la superficialidad que la caracteriza." Lo abracé nuevamente, y no sé porqué, pero le pedí disculpas, en nombre de la humanidad, en nombre de todas las mujeres, le dije "lo siento", porque era horrible haber tenido la razón, hubiera preferido estar en un error.
La tarde avanzó y con los ruidos de las chicharras la noche anunció su llegada, le dije "quédate esta noche" y él accedió. Los humores se calmaron y una vez sereno comenzó aquel discurso que jamás olvidaré, porque es un discurso gastado, porque es un discurso que todo hombre alega en pláticas de bares, de redes sociales en línea, porque siempre creerán que los hombres son los mártires y las mujeres son las malas, las brujas de los cuentos de hadas, las perras que envían a los hombres a la friendzone, y comenzó:
"Las mujeres van por la vida alegando que nosotros somos los que siempre tenemos la última palabra, las que alegan que siempre hay que ser uno el que se acerque a saludarla, a conquistarla, a dar el primer paso. Van por la vida con aires de belleza y grandeza, con la intención de verse conquistadas y así cazar a su príncipe azul cuál temporada de patos, pero la verdad es que son ellas las que van por la vida cautivando, intentando atraerte para que te pares y seas tú quién pase la vergüenza del rechazo, y si acaso les inspiras algo, te atrapan como si fueran arañas, tejen una red suave y fina, y sin darte cuenta te tienen en su lista de amiguitos. Intentas conquistar, te desvives, les das amor, regalos, eres eso que siempre dicen querer, el hombre tierno, el hombre que les presta atención, el hombre sensible, y entonces nada, un día te levantas y te das cuenta de que algo esta fallando en esa relación, y es que no existe relación, que no es lo mismo, y por fin tomas el valor y le confiesas tu amor y simplemente te dicen "yo también te quiero, pero sólo como amigos" o peor aún, "te quiero tanto, como a un hermano".Y entonces reaccionas, ¡a la mierda con eso!, ¿hermanos? Yo ya tengo, ¿amigos? los necesarios ya los tengo, ¿qué acaso no era mejor pasar por la vergüenza del rechazo? Son malas, embusteras, si la vida fuera un cuento, sin duda ellas serían las brujas."
¿Por qué los hombres se aferran a sentirse las víctimas de las relaciones sociales?, ¿por qué ellos siempre son los afectados en el rechazo?, ¿por qué siempre viven diciendo que son unos machos sin sentimientos y a la primera de cuentas son los primeros en salir a llorar, a hablar mal de quién simplemente los rechazó?
Nunca me había enojado tanto con mi mejor amigo, no cómo esa noche, porque podía entender que estaba aún cegado por el dolor, que por lo mismo olvidaba que yo era mujer, que tenía vagina en lugar de pene, pero no podía arremeter contra las mujeres de aquella forma por el simple hecho de que una, solamente una de ellas lo había lastimado. Entonces le dije:
"No te creas la víctima aquí, porque si de la friendzone hablamos, todos somos culpables de ella, porque el juego siempre es de dos, porque uno la crea y el otro la acepta. Y no creas que ustedes siempre serán los frienzonados, porque a nosotras también nos envían allí.
La zona de la amistad siempre será para todos, hombres y mujeres, pero la pequeña diferencia es que la mayoría de nosotras no andamos por el mundo, por facebook y twitter hablando de que nos mandaron allí, porque muchas de nosotras aceptamos que fue nuestro error, porque aceptamos esos términos, porque no hablamos con la verdad de ante mano. Si te gusta alguien, se lo dices, no estableces una amistad con pretensiones de algo más, las cosas claras, sin mal entendidos, porque entonces serás parte de la friendzone.
No somos las brujas, ustedes no son los villanos, la vida es simple, la vida es hermosa y no vale complicarla con estupideces de "seamos amigos y a ver que dice el tiempo", al toro por los cuernos. ¿Y sabes por qué te digo todo esto con seguridad? Porque yo también he estado allí, porque yo también quise alguna vez a alguien y por temor no se lo dije y entonces la amistad nos atrapó, y cuando me di cuenta ya era demasiado tarde para decirle que lo que quería era un noviazgo y no una amistad como pocas.
Y si ya estás allí, si crees que no funcionará, entonces haz funcionar la amistad, pero aún así díganse que serán amigos, porque no hay mejor cosa como hablar con la verdad."
Ambos nos quedamos en silencio, esperando que alguno rompiera con aquella atmósfera creada por aquel pequeño debate. La verdad siempre cala, la verdad puede ser un puñal con dirección a la opinión. Entonces lloré, porque era eso o estar callada y sentir que traicioné a mi amigo hablándole del amor y la amistad.
Él me abrazó, porque se dio cuenta de que en aquella habitación no había un corazón roto, sino dos, que en aquella cama no había dos friendzoneados, sino dos.
Me abrazó tan fuerte, porque se dio cuenta de que a las mujeres también las mandan a la friendzone.
Lo abracé tan fuerte, porque entendió que eramos dos almas desquebrajadas.
Lo abracé tan fuerte, porque entendió que eramos dos almas desquebrajadas.
"Dedicado a ellos, los que están en la friendzone y culpan a las mujeres.
Dedicado a ellas, las que no saben hablar con la verdad.
Dedicado a mi amiga, porque esta en la friendzone sin miras de salir de ella."
Dedicado a ellas, las que no saben hablar con la verdad.
Dedicado a mi amiga, porque esta en la friendzone sin miras de salir de ella."